El meditador practicando el Radja Yoga y preparándose para el Agni Yoga, es un Creador activo. Es un protagonista que resucita y asciende a Su propia Divinidad. Es un mago viajero. Sabe cómo ascender afinando su frecuencia existencial. Sabe cómo entrar, desde su corazón en "estado de alfa" y llegar a este lugar sagrado, sensible y etérico en el centro de su cerebro, que la Tradición inmemorial transhimaláyica llama "el Punto medio, el Portal cósmico interior del Ser humano". Su expresión físico es la glándula pineal.
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El meditador, llegando a las alturas frecuenciales del Punto Medio, abre de par en par su Portal cósmico interior. Desde este umbral iluminado enciende una nueva sensibilidad, la del "Sexto Sentido". Y así surge su Sendero. Es pura Luz animada por el Amor y suscitada por el Poder creador. Lo conduce hacia adentro. El aliento de su misteriosa Singularidad divina lo aspira. Luego, fusiona con su Presencia surgida desde el horizonte, desde la hondura de su propio Agujero negro. Sorprendido, experimenta que no es algo atribuido al "Ajeno, trascendente", sino algo revelado maravillosamente como "Propio, inmanente".
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De verdad, el meditador creativo es un mago viajero. Caminando, vuelve luminosamente consciente, que está sirviendo. Por su consonancia meditativa eleva la frecuencia de todo el Planeta así que de toda la Raza de los Seres humanos para que se realice la tan soñada Esperanza de Gloria.
El meditador, llegando a las alturas frecuenciales del Punto Medio, abre de par en par su Portal cósmico interior. Desde este umbral iluminado enciende una nueva sensibilidad, la del "Sexto Sentido". Y así surge su Sendero. Es pura Luz animada por el Amor y suscitada por el Poder creador. Lo conduce hacia adentro. El aliento de su misteriosa Singularidad divina lo aspira. Luego, fusiona con su Presencia surgida desde el horizonte, desde la hondura de su propio Agujero negro. Sorprendido, experimenta que no es algo atribuido al "Ajeno, trascendente", sino algo revelado maravillosamente como "Propio, inmanente".
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De verdad, el meditador creativo es un mago viajero. Caminando, vuelve luminosamente consciente, que está sirviendo. Por su consonancia meditativa eleva la frecuencia de todo el Planeta así que de toda la Raza de los Seres humanos para que se realice la tan soñada Esperanza de Gloria.
Wiliam Van Marsenille
http://vimeo.com/4292894
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